La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible genera un espacio de oportunidad único para las empresas que quieran reforzar sus modelos de negocio integrándose de manera más estable y robusta en los contextos sociales y medioambientales donde operan. En este nuevo contexto, el sector privado empresarial está llamado a construir los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la mano del resto de actores, en ámbitos como el crecimiento inclusivo, los patrones de consumo y producción sostenibles, el acceso a energías renovables, la gestión sostenible del agua y del saneamiento, la innovación y el empoderamiento de las mujeres e igualdad de género.
La Cooperación Española entiende al sector privado empresarial como aliado en la promoción del desarrollo humano, de tal manera que las empresas pueden jugar un papel relevante en la cooperación al desarrollo española. Se proponen cuatro ejes para la incorporación del sector empresarial en la cooperación española: comunicación, formación y generación de capacidades; generación de incentivos y de un entorno propicio a la acción; diseño y puesta en marcha de programas piloto y creación de una unidad organizativa impulsora y de referencia en el sistema.
En este contexto, la AECID apostó por las Alianzas Público-Privadas para el Desarrollo como un instrumento de cooperación, basado en una relación voluntaria, colaborativa y formal entre la AECID, las administraciones públicas de los países socios y una o varias entidades del sector empresarial, de la sociedad civil y del ámbito universitario, de España, de los países socios o de terceros países, en la que se establece un objetivo común, con un demostrable impacto en desarrollo, y en la que se definen conjuntamente las responsabilidades y se asumen conjuntamente los recursos, los riesgos y los logros. En este marco se diseñó un Protocolo AECID para la gestión de alianzas público privadas para el desarrollo (APPD).
Las APPD son un instrumento priorizado en las estrategias diferenciadas de cooperación en los países de renta media alta, por lo que destaca su utilización en la Cooperación con América Latina y el Caribe, en particular, en los países en los que se están rediseñando las relaciones de cooperación al desarrollo y con los que se están firmando los “Acuerdos de Nueva Generación” como es el caso de Panamá.
Existen otros instrumentos que también abordan el sector empresarial es la convocatoria de subvenciones de Acciones de Cooperación para el Desarrollo para la realización de proyectos de innovación para el desarrollo, creada en el año 2104 y abierta a todos los actores (sector privado empresarial, sector social y sector académico y de la investigación) y que favorece la constitución de consorcios o alianzas entre todos, sin embargo, este instrumento no aplica para países de renta media.
En Panamá existen varias APPD en curso y otras en proceso de identificación. Para más información ver la sección “Empresa y Desarrollo” en Sectores de intervención.